Revolucionario andaluz natural de esta localidad que, al mando de seis mil campesinos armados, en 1861 ocupó durante cinco días la ciudad de Loja frente a las fuerzas gubernamentales enviadas por su paisano y rival, el General Narváez. Tuvo también una intervención destacada en la revolución de septiembre de 1868. Su gesta quedaría inmortalizada en uno de los “Episodios Nacionales” del escritor Benito Pérez Galdós.

Fundó el Centro Obrero y la sociedad Fraternidad Obrera, a través de la cual los obreros en paro se dedicaron a la reconstrucción de edificios ruinosos para sorteárselos entre ellos o venderlos y repartir su importe. El Centro Obrero fue la única seguridad para el obrero andaluz occidental de finales del siglo XIX y principios del XX. Las ideas revolucionarias que habían estallado con ideas anarquistas y socialistas, solo pudieron apaciguarse con la brutal represión del gobierno y en parte con hermandades de trabajadores como la que organizó Pérez del Álamo.

La colaboración del veterinario, juntamente con otros revolucionarios, para enviar toda clase de información a Pablo Iglesias fue decisiva en la fundación del Partido Socialista Obrero Español. Igualmente, en los últimos años de su vida se carteó con Benito Pérez Galdós, quien, como ya se ha mencionado, incluyó la gesta de Pérez del Álamo en sus famosos Episodios nacionales.